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De cómo no hacerse cargo


Por si acaso no pregunto. Si no pregunto no sé y si no sé no hago nada. No saber no me hace responsable.

Por si acaso no pregunto, a ver si descubro algo que no me queda cómodo y no me es grato.


Por si acaso no pregunto, porque al preguntar me hago cómplice; no importa de qué. Cómplice es culpable, solo porque es no ser inocente.

Por si acaso no pregunto y no me podés hacer cargo de nada, porque si no sé no pasa y si pasa, seguro alguien más lo resolverá. 

No ser parte del problema, pero tampoco de la solución. Esa es la idea y entonces por eso, por si acaso no pregunto. 

Porque las cosas pasan rápido y hasta parece que no pasaran si uno nunca, jamás dice ni pregunta nada.

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